Los casinos utilizan las matemáticas

Cómo los casinos utilizan las matemáticas para ganar dinero cuando juegas en las tragaperras

Cuando trabajaba en seguridad en un casino de Atlantic City, los clientes me preguntaban a menudo:"¿Qué máquina tragaperras es la que va a golpear?" Mi respuesta habitual fue: "Si lo supiera, ya no estaría trabajando aquí", seguida de una risita sabia. Nunca dejó de recibir al menos una sonrisa a cambio.
Incluso las tragaperras con carretes físicos utilizan software y circuitos sofisticados.
Ahora que soy el Director del Centro de Investigación de Juegos de la Universidad de Nevada, Las Vegas, de vez en cuando alguien me pregunta, "¿Qué máquina es la que va a golpear?" Mi respuesta habitual es la misma, pero estoy en una mejor posición para explicar cómo funcionan las tragaperras, por qué la gente las juega y qué es lo que usted debe saber sobre ellas.
Las máquinas tragaperras siguen siendo la parte más importante de los casinos en los Estados Unidos para ganar dinero. En muchos estados, los casinos obtienen entre el 65 y el 80 por ciento de sus ingresos por apuestas a través de las tragaperras. En Las Vegas, el porcentaje varía desde el 88% en los casinos que atienden principalmente a los locales hasta el 50% en el Las Vegas Strip, donde los grandes apostadores que apuestan decenas de miles de dólares por mano sesgan los resultados a favor de los juegos de mesa. Cada día, los jugadores invierten millones de dólares en máquinas tragaperras. Por qué?
Una máquina tragaperras moderna es fácil de jugar. Los jugadores insertan moneda, deciden el monto de su apuesta, presionan girar y esperan lo mejor. Hay muchas variedades de máquinas tragaperras en los casinos hoy en día, desde máquinas con carretes de hilar físicos (la gente de la industria las llama "steppers") hasta tragaperras que reproducen carretes de hilar en una pantalla de video, pero todas juegan esencialmente de la misma manera. Video póquer es una variante especial de la ranura de vídeo en la que los jugadores pueden utilizar alguna habilidad en la celebración de las tarjetas más ventajosas. Todas las demás máquinas tragaperras, sea cual sea su marca, son juegos de pura casualidad.
El aspecto casual de las máquinas tragaperras es lo que las hace tan atractivas para tanta gente. Si usted sabe cómo poner dinero en una tragamonedas y presionar un botón, tiene la misma oportunidad de ganar un premio mayor que alguien que ha estado jugando durante veinte años. Al final, todo se reduce a la suerte. ¿Y quién no se siente afortunado, a veces?
Las máquinas tragaperras son aparentemente fáciles de jugar, con cuatro pasos desde "querer jugar" hasta "cobrar".
Las máquinas tragaperras atraen a los casinos porque son, siempre y cuando un número suficiente de personas las jueguen, generadoras de dinero estables. Para explicar por qué son tan confiables para los casinos, hablé con Bob Ambrose, quien irrumpió en la industria en Tropicana Atlantic City a principios de la década de 1980 y hoy en día es consultor de juegos de azar e instructor de administración de casinos en Fairleigh Dickinson University. "Es todo," dice,"sobre las matemáticas del juego."
Cuando los casinos miran el rendimiento de una máquina tragaperras, el número más básico que ven es la gota. Es el dinero depositado por el jugador en las máquinas. Otro número que puedes escuchar es el handle, que Ambrose define como la cantidad total apostada por un jugador. ¿Cómo puede un jugador apostar más dinero del que ella pone? Bueno, si ella pone $100, gana un premio mayor de $50 y sigue jugando hasta que todo su dinero se agote (incluyendo esos $50 de"ganancia"), ha generado una caída de $100 y un mango de $150.
Lo que queda después de que la máquina paga sus botes es la ganancia del casino, también conocida como ingresos.
Entonces, ¿cómo deciden las máquinas tragaperras quién gana y quién pierde? "Los pagos en las franjas horarias se calculan estadísticamente", dice Ambrose. Pulsando Spin se activa el generador de números aleatorios, que es un algoritmo que determina si cada giro es una victoria o una derrota, y qué tan grande es una victoria. Cada juego, dice Ambrose, tiene un porcentaje fijo de retención y una tabla de pago que detalla con qué frecuencia y cuánto se devolverán los juegos.
Los videojuegos de póquer, que tienen elementos de habilidad, a menudo devuelven más a los jugadores que otras máquinas tragamonedas.PHILIPPE LOPEZ/AFP/Getty Images
Los juegos con baja volatilidad, como el video póquer, se amortizan con más frecuencia pero en cantidades más pequeñas, mientras que los juegos de alta volatilidad, como el progresivo de Megabucks, tienen menos golpes, más grandes (piense en varios millones de dólares como máximo).
Por lo tanto, mientras que el beneficio potencial de un juego de alta volatilidad puede ser mayor, su dinero generalmente le dará más tiempo para jugar en un juego de baja volatilidad.
¿Puede un jugador obtener una ventaja en una ranura que se basa en la pura casualidad? En realidad, no. "Hay una ventaja estadística para los casinos", dice Ambrose. "La matemática del juego asegura que los casinos generen una victoria positiva para ellos mismos."
Pero el jugador puede beneficiarse de una cosa: si las máquinas tragaperras nunca pagaran nada, los jugadores dejarían de jugar y los casinos cerrarían. La mayoría de las jurisdicciones exigen que las tragaperras devuelvan una cantidad mínima establecida a los jugadores (85 por ciento es el número mágico en Nevada, aunque la mayoría de las máquinas devuelven más que eso en promedio). Puede que no le sirva de mucho cuando haya perdido su último crédito, pero alguien tiene que ganar una parte de ese 85 por ciento, y la próxima vez podría ser usted.
Y ese es el atractivo de las tragaperras, tanto para el administrador del casino como para el cazador de premios mayores. "Para el jugador", concluye Ambrose, "tiene que haber una posibilidad realista de ganar. Pero a la larga, el borde siempre caerá a favor del casino".
Algo para recordar, porque no importa cuán afortunado te sientas, eventualmente el casino se volverá más afortunado.
Diviértete jugando a las tragaperras, pero recuerda, no construyen todo esto regalando dinero.
"
Cuando trabajaba en seguridad en un casino de Atlantic City, los clientes me preguntaban a menudo:"¿Qué máquina tragaperras es la que va a atacar?"
Mi respuesta habitual fue: "Si lo supiera, ya no estaría trabajando aquí", seguida de una risita sabia. Nunca dejó de recibir al menos una sonrisa a cambio.
Incluso las tragaperras con carretes físicos utilizan software y circuitos sofisticados.
Ahora que soy el Director del Centro de Investigación de Juegos de la Universidad de Nevada, Las Vegas, de vez en cuando alguien me pregunta, "¿Qué máquina es la que va a golpear?"
Mi respuesta habitual es la misma, pero estoy en una mejor posición para explicar cómo funcionan las tragaperras, por qué la gente las juega y qué es lo que usted debe saber sobre ellas.
Las máquinas tragaperras siguen siendo la parte más importante de los casinos en los Estados Unidos para ganar dinero. En muchos estados, los casinos obtienen entre el 65 y el 80 por ciento de sus ingresos por apuestas a través de las tragaperras. En Las Vegas, el porcentaje varía desde el 88% en los casinos que atienden principalmente a los locales hasta el 50% en el Las Vegas Strip, donde los grandes apostadores que apuestan decenas de miles de dólares por mano sesgan los resultados a favor de los juegos de mesa. Cada día, los jugadores invierten millones de dólares en máquinas tragaperras. Por qué?
Una máquina tragaperras moderna es fácil de jugar. Los jugadores insertan moneda, deciden el monto de su apuesta, presionan girar y esperan lo mejor. Hay muchas variedades de máquinas tragaperras en los casinos hoy en día, desde máquinas con carretes de hilar físicos (la gente de la industria las llama "steppers") hasta tragaperras que reproducen carretes de hilar en una pantalla de video, pero todas juegan esencialmente de la misma manera. Video póquer es una variante especial de la ranura de vídeo en la que los jugadores pueden utilizar alguna habilidad en la celebración de las tarjetas más ventajosas. Todas las demás máquinas tragaperras, sea cual sea su marca, son juegos de pura casualidad.
El aspecto casual de las máquinas tragaperras es lo que las hace tan atractivas para tanta gente. Si usted sabe cómo poner dinero en una tragamonedas y presionar un botón, tiene la misma oportunidad de ganar un premio mayor que alguien que ha estado jugando durante veinte años. Al final, todo se reduce a la suerte. ¿Y quién no se siente afortunado, a veces?
Las máquinas tragaperras son aparentemente fáciles de jugar, con cuatro pasos desde "querer jugar" hasta "cobrar".
Las máquinas tragaperras atraen a los casinos porque son, siempre y cuando un número suficiente de personas las jueguen, generadoras de dinero estables. Para explicar por qué son tan confiables para los casinos, hablé con Bob Ambrose, quien irrumpió en la industria en Tropicana Atlantic City a principios de la década de 1980 y hoy en día es consultor de juegos de azar e instructor de administración de casinos en Fairleigh Dickinson University. "Es todo," dice,"sobre las matemáticas del juego."
Cuando los casinos miran el rendimiento de una máquina tragaperras, el número más básico que ven es la gota.
Es el dinero depositado por el jugador en las máquinas. Otro número que puedes escuchar es el handle, que Ambrose define como la cantidad total apostada por un jugador. ¿Cómo puede un jugador apostar más dinero del que ella pone? Bueno, si ella pone $100, gana un premio mayor de $50 y sigue jugando hasta que todo su dinero se agote (incluyendo esos $50 de"ganancia"), ha generado una caída de $100 y un mango de $150.
Lo que queda después de que la máquina paga sus botes es la ganancia del casino, también conocida como ingresos.
Entonces, ¿cómo deciden las máquinas tragaperras quién gana y quién pierde? "Los pagos en las franjas horarias se calculan estadísticamente", dice Ambrose. Pulsando Spin se activa el generador de números aleatorios, que es un algoritmo que determina si cada giro es una victoria o una derrota, y qué tan grande es una victoria. Cada juego, dice Ambrose, tiene un porcentaje fijo de retención y una tabla de pago que detalla con qué frecuencia y cuánto se devolverán los juegos.
Los videojuegos de póquer, que tienen elementos de habilidad, a menudo devuelven más a los jugadores que otras máquinas tragamonedas.PHILIPPE LOPEZ/AFP/Getty Images
Los juegos con baja volatilidad, como el video póquer, se amortizan con más frecuencia pero en cantidades más pequeñas, mientras que los juegos de alta volatilidad, como el progresivo de Megabucks, tienen menos golpes, más grandes (piense en varios millones de dólares como máximo). Por lo tanto, mientras que el beneficio potencial de un juego de alta volatilidad puede ser mayor, su dinero generalmente le dará más tiempo para jugar en un juego de baja volatilidad.
¿Puede un jugador obtener una ventaja en una ranura que se basa en la pura casualidad? En realidad, no. "Hay una ventaja estadística para los casinos", dice Ambrose. "La matemática del juego asegura que los casinos generen una victoria positiva para ellos mismos."
Pero el jugador puede beneficiarse de una cosa: si las máquinas tragaperras nunca pagaran nada, los jugadores dejarían de jugar y los casinos cerrarían. La mayoría de las jurisdicciones exigen que las tragaperras devuelvan una cantidad mínima establecida a los jugadores (85 por ciento es el número mágico en Nevada, aunque la mayoría de las máquinas devuelven más que eso en promedio). Puede que no le sirva de mucho cuando haya perdido su último crédito, pero alguien tiene que ganar una parte de ese 85 por ciento, y la próxima vez podría ser usted.
Y ese es el atractivo de las tragaperras, tanto para el administrador del casino como para el cazador de premios mayores. "Para el jugador", concluye Ambrose, "tiene que haber una posibilidad realista de ganar. Pero a la larga, el borde siempre caerá a favor del casino".
Algo para recordar, porque no importa cuán afortunado te sientas, eventualmente el casino se volverá más afortunado.
Diviértete jugando a las tragaperras, pero recuerda, no construyen todo esto regalando dinero.